Agradecemos a Dios por permitirnos abrir el tercer campamento tecnológico en nuestra iglesia, esta vez con más niños que antes. Pudimos tener nuevos participantes que vinieron a tomar los cursos de Programación y Edición de Video por primera vez. Estuvo lleno de desafíos, pero pudimos ver a Dios trabajando a través del ministerio que hizo que todo valiera la pena. Queremos compartir la historia de uno de los nuevos integrantes, “Eder”, un niño que vino gracias a Kevin y William de los que ya les hemos hablado en el pasado. Eder tiene 11 años y es primo de Kevin y William.
Algo increíble es que Eder llegó al Campamento Tecnológico con poco o ningún conocimiento de computadoras, y mucho menos editar videos o programar. Podríamos decir que iba a ser duro cuando notamos desde el primer día que era muy tímido. Él prefería no establecer conversaciones con los demás y optaba por estar lejos de todos, era un verdadero reto tener una conversación con él.
Después de la primera clase notamos que Eder estaba muy interesado, y aunque nunca había oído hablar de programación y nunca había editado un video, poco a poco fue comprendiendo los conceptos. Para nuestra sorpresa comenzó a dar pasos avanzados porque descubrió lo mucho que le gustaban estas clases. Después de nuestra tercera lección vimos cómo pasó de no saber nada a empezar a ayudar a sus compañeros con los ejercicios.
Con el tiempo pudimos tener muchas conversaciones con él y logramos presentarlo a nuestro grupo de adolescentes en la iglesia, ya se está abriendo más con los demás, y también tiene mucha confianza en nosotros. Esto también nos permitió invitar a su mamá que ha comenzado a asistir a nuestros estudios en la iglesia. Al final del curso, Eder quedó en primer lugar en todo el campamento y está ansioso por volver a tomar más cursos de tecnología y poder seguir aprendiendo.
Gracias por su apoyo y aliento mientras continuamos equipando e impactando generaciones para Cristo a través de Tekton. ¡No podríamos hacerlo sin ti!
